martes, 3 de mayo de 2011

El heredero de Aimar

No lo digo yo, lo afirmaba el 'Checho' Batista, seleccionador argentino, en una entrevista a Punto Pelota: "River tiene un chico muy completo, Lanzini se llama, es muy completo aunque todavía le falta. Muy parecido a Pablo Aimar".

Con 18 años, Manuel Lanzini representa, junto a Lamela, el resurgir de un histórico como River Plate. De apenas 1'69 cm de estatura, Lanzini es un enganche ofensivo que puede caer a ambas bandas por su buen manejo de balón con ambas piernas. Desde luego, genes futboleros no le faltan, su padre y su hermano también se dedicaron al noble arte de la pelota (su hermano juega en Platense).

Su amor a los colores 'millonarios' están fuera de toda duda. Ramón Maddoni (descubridor de talentos como Riquelme, Tévez o Cambiasso) intentó convencerlo para que probase en las categorías inferiores de Boca Juniors cuando jugaba en 4 de Mayo y Lanzini fue rotundo: "Yo quiero llegar a River Plate". Su insistencia tuvo premio en 2002, cuando llegó a River precisamente cuando estaba probándose en Vélez Sarfield. Comenzó jugando de volante izquierdo.

Su primer gran éxito fue en 2008 al proclamarse campeón de Liga de la Octava División venciendo 3-0 a su eterno rival, Boca Juniors, con dos goles de Lanzini. Convirtió 9 dianas en todo el campeonato. Fue llamando la atención de los técnicos de Nuñez hasta que Ángel Cappa, DT de River en 2010, se lo llevó a la pretemporada invernal y comenzó a darle paso en el equipo titular, siendo un desconocido para la hinchada 'millonaria'.

A partir de ahí, a pesar del cambio de entrenador y alguna lesión, Lanzini ha ido evolucionando hasta hacerse un fijo en el esquema de River Plate. El equipo se sitúa 2º en el Torneo Clausura de 2011.

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